martes, 22 de mayo de 2012

Capítulo 6 — Nuevo Integrante — Parte 4.

Una sonrisa surcó mi rostro. Seguí impaciente para ver qué haría, mi primera impresión fue: “está vivo”, eso era lo que más me preocupaba.

Miró de derecha a izquierda. Había dejado de temblar. Notó raro el lugar en donde estaba, así que alzo la vista y me vio a los ojos. Creí que había entendido que yo era el responsable de que no tuviese frío, pero enseguida pensé que se iría corriendo. No lo hizo, se acurrucó en mi abdomen y me acarició con la cabeza. Me permití alzar una mano y acariciarlo. Estaba sucio al tacto, pero no apestaba mal sino que tenía ese olor a cachorro. Necesitaba un buen baño caliente y una larga noche de descanso. Hablo por los dos.

El correr y la banda de sentimientos que sentí aquella noche fueron indescriptibles.

En parte me arrepentí de haberme escapado, y en parte no. Ya te imaginas por qué.

miércoles, 16 de mayo de 2012

Capítulo 6 — Nuevo Integrante — Parte 3.

Creí que se acercaría corriendo, que es lo que para cualquiera se hubiese preparado. Pero no. Fue dando lentos pasos hacia mí con su arma apuntando hacia abajo. Yo seguía inmóvil, que es lo que hice cuando luché contra Amy: esperar a que él atacara primero.


Ese lapso de tiempo, que se me hizo una eternidad, sucedió, en realidad, más rápido de lo que imaginé. Bueno, tampoco es que él estaba muy lejos, unos cinco pasos y llegaba hasta mi posición.


Pensé que era un buen momento para estar en el papel de malo lo mejor posible, total un poco de diversión no me vendría mal. Sinceramente, no entendía de dónde saqué el valor para hacerlo, para seguir con mi postura segura porque, por dentro, estaba más asustado que… que algo asustadizo, creo.


lunes, 14 de mayo de 2012

Capítulo 6 — Nuevo Integrante — Parte 2.

No le tenía miedo a nada a pesar de que las calles estaban todas oscuras, excepto por algunos faroles encendidos que alumbraban ciertas zonas de las cuadras que recorría, veía todo muy claro.

Cada tejado era diferente. Uno más alto que el otro, pero no eran problema, un pequeño esfuerzo con las piernas y, con los brazos que estaban en movimiento hacía unos pequeños/grandes aventones hacia arriba, los terminaba alcanzando.

Mis pies y manos ni yo los llegaba a ver. Se convertían en una mancha borrosa con los colores de mi piel mezclados con los de la ropa que llevaba puesta.

Cuando llegaba a un edificio, tenía que rodearlo. Pero eso no me detenía. Podía ver las grandes construcciones a más de dos cuadras de distancia. Claro que en un día soleado cualquiera lo hace, pero intenta verlas de noche, con lluvia y niebla. Y al terminar de correr por los techos una manzana creerás que bajaba en la esquina y volvía a subir. Si es así no acertaste. Con un simple salto de un techo a otro, que lo separaba el ancho de una calle, bastaba.

miércoles, 9 de mayo de 2012

Capítulo 6 — Nuevo Integrante — Parte 1.

Desperté. Al abrir los ojos noté que el cielo seguía oscuro y caía una leve llovizna sobre la ciudad. Era una típica imagen inglesa.

La luna emitía un leve resplandor que entraba por la ventana sin estar tapada por alguna cortina, me la quedé mirando por un buen rato, hasta que tomé noción de que había pasado ya mucho tiempo.

Me fijé la hora en el reloj de mi celular, el cual lo había dejado sobre la mesa de noche. Eran las dos y quince. No había dormido casi nada. Pero no tenía sueño, es más, mis ojos estaban completamente abiertos con las pupilas dilatadas a falta de luz.

Y había algo raro en todo ése asunto. Mi cuerpo estaba… perfecto. Me sentía con fuerza, con energía, me sentía con muchas ganas. Ganas de golpear, romper, correr… has sentido esa sensación alguna vez en tu vida, ¿verdad? Bueno, pero en mi lugar era mucho más poderoso, más fuerte, más instintivo. Instintivo. Así lo sentía, totalmente natural. Pero sabía que no era así.

domingo, 6 de mayo de 2012

Capítulo 5 — Entrenamiento — Parte 3.

Luego de hablar un rato con Drew y mirar un poco de TV, aunque ni siquiera la vi, me la pasé pensando y aburrirme a mares mientras Amy estaba haciendo no sé qué cosa en su habitación, en la cual no podíamos ni asomar la cabeza, llegó la noche.

No sabía si Amy pretendía alimentarnos o qué. Pero yo tenía hambre, entonces fui a la cocina de esas que están en la tele y parecen cocinas gourmet, y empecé a revisar.

Encontré varias cosas, como carne, verduras, lácteos, jugos, pastas, etc. Me preparé algo bien simple como unos macarrones con salchichas. Drew no opinó, así que cociné para los dos.

Digamos que no soy un chef ni nada por el estilo, porque la pasta se me pasó un poco y quedó media fea. Pero en lo demás no hubo problema… ni que fuera tan difícil hacer salchichas.

Nos sentamos en la mesa para desayunar que estaba en el centro de la cocina y comimos.

miércoles, 2 de mayo de 2012

Capítulo 5 — Entrenamiento — Parte 2.

Asentí. La idea de pelear con una mujer no me agradaba, y menos contra ella.

Amy esperó. ¿Acaso quería que yo atacara primero? No caería en eso. Así que espere también.

Entendió lo que yo pretendía, porque comenzó a dar lentos pasos hacia mí. Ella sabía que yo podía esquivar todos sus movimientos: era mucho más rápido.

Amy achinó los ojos esperando respuesta alguna de mi parte. No lo iba a hacer.

Sin más, corrió hacia mí con los labios fruncidos y saltó sobre mí. Me aparté con tal velocidad que creí que había sido sólo un borrón desde otros puntos de vista.

Pero no se dio por vencida.